De pronto me mostraron esta foto como si nada, mira, una foto tuya de hace como 24 años atrás, la veo y soy yo, soy como la misma persona que soy ahora y al mismo tiempo soy otra persona, soy yo hace cinco minutos atrás con las mismas ideas, los mismos conceptos de la vida arraigados de la misma forma, soy yo, con un poco menos de años, un poco menos de vivencias, pero la misma persona, como si esa niña también le gustara escribir, sacar fotos y odiara la agronomía, apuesto a que ella no quiere hacer su tesis, quiere jugar con barbies, yo también quiero jugar con ellas y vestirlas, apuesto a que si me mirara en el espejo me vería igual, hasta con el mismo chaleco sin mangas. ¿Por qué cuando me veo a mí misma en mi imaginación me veo como esa niña y no como soy ahora, con muchos años más que ella?, En mi concepción de mí misma, soy una niña de 5 o 12 años -no hay diferencia porque siempre soy la misma- enfrentada a diferentes escenarios -la vida, o el correr de los años, que no son tiempo sino meros contextos-, y nada más. ¿A alguien más le pasa eso?... la miro otra vez y es otra persona, es una niña. Yo no soy una niña, soy una mujer de 29 años frustrada con su carrera, esa niña posiblemente no sabe lo que es la frustración y después de que le tomaran la foto saldrá corriendo con su mejor amiga a mojarse los pies en los canales de regadío a escondidas de sus madres y jugarán a que las barbies van a la playa y se hacen máscaras de barro para el cutis.
Miro la foto y veo demasiadas cosas que no entiendo. ¿Por qué sigo creyendo que soy igual? ¿por qué cuando tengo un sueño de aventuras soy esa niña salvando a mi papá o escapando de bandidos con mi papá y mi mamá –que son jóvenes como entonces, o como siempre lo han sido en mi concepción de ellos, porque ellos jamás envejecen en mi mente-, y mi hermano chico es como ahora –un chico de 20 años- y yo soy como esa niña de cinco y sin embargo sigue siendo mi hermano menor y nuestra relación es como ahora y conversamos de los mismos temas que ahora, cuando tengo 29 años? ¿Tengo un desorden temporal?. Es raro, pero esa foto me provoca todo esto y me siento insoportablemente atraída a mirarla una y otra vez. Es como mirarme en un espejo lindo, mirarme y pensar que tengo que irme corriendo al pino al final del camino de tierra y ver quién gana, la Cristina o yo, recogeremos los cocos del pino y nos comeremos sus semillas negras, jugaremos a hacer ollas de barro y las secaremos al sol. Dejo de mirarla y siento que debo hacer la tesis y no quiero. Y luego pienso que esa niña está jugando para no hacer su tesis, para no ir a la universidad a hablar con su profesor guía porque le da miedo y se queda jugando debajo del pino, donde nadie la va a encontrar nunca.
Soy la misma persona. Soy la misma hace cinco minutos atrás que hace 24 años. Nada ha cambiado mucho salvo quizás las circunstancias, el entorno -el contexto-, nada más. Soy una niña de cinco años y supongo que todavía no me he dado cuenta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario